El árbitro principal del Altrincham - Colwyn Bay, el inglés Mark Ackerman, se lesionó a siete minutos del final del encuentro, que ganaba el equipo local por 2-0 en el 'FA Trophy' el 16 de noviembre. El colegiado sintió diversos tirones y pinchazos en su pierna, por lo que no pudo continuar dirigiendo el choque. Sin embargo, el partido no disponía de la figura del cuarto árbitro porque la normativa de la categoría así lo dictaminaba.
Fuente: Daily Mail
Los empleados del Altrincham intentaron solucionar por su cuenta el incidente y solicitaron la presencia de un árbitro federado entre los asistentes al estadio por megafonía. A los pocos minutos, un aficionado se personó en los vestuarios y presentó su carnet que le acreditaba como árbitro federado de fútbol. Ambos clubes no se lo pensaron y dejaron la batuta del encuentro a este trencilla.
Pero no todo iba a ser de color de rosa. Con el paso de los segundos, entrenadores y jugadores se percataron de que el árbitro elegido no reunía las condiciones mínimas para participar en el encuentro. Y es que el colegiado sustituto había estado tomando bebidas alcohólicas en los prolegómenos del partido en un bar cercano. El olor a alcohol era bastante fuerte y los dirigentes de ambos clubes, junto con los árbitros asistentes, decidieron suspender el partido.
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Árbitros, entrenadores y jugadores deciden qué hacer |
Pero no todo iba a ser de color de rosa. Con el paso de los segundos, entrenadores y jugadores se percataron de que el árbitro elegido no reunía las condiciones mínimas para participar en el encuentro. Y es que el colegiado sustituto había estado tomando bebidas alcohólicas en los prolegómenos del partido en un bar cercano. El olor a alcohol era bastante fuerte y los dirigentes de ambos clubes, junto con los árbitros asistentes, decidieron suspender el partido.
Fuente: Daily Mail
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